Karla Mayeli Román Rivera, realizó sus estudios como Médico Cirujano Partero en la UNAM, y cursó la Especialidad en Medicina Familiar en la misma institución, así como en el IMSS, donde labora con experiencia clínica desde hace más de 15 años.  

En noviembre de 2019 llega a su vida MTD (Manifiesta Tus Deseos) donde Karla encuentra que el desarrollo humano es una herramienta esencial aplicable en la consulta diaria con sus pacientes, con resultados benéficos tanto para ellos como para el médico también.

Desde entonces, sintiendo una gran pasión por compartir, y crear a partir de los resultados que ella misma ha encontrado en su vida personal, familiar y laboral, se inicia en febrero de 2020 como Mensajera de Luz dentro del Faro de Alonso y Geómetra.

Encontrando aún más pasión y deleite por compartir esta experiencia que modificó su vida radicalmente, decide iniciarse como mentora en el verano del 2021.

A Karla, en su formación médica, se le había enseñado, que el Ser estaba compuesto de mente y cuerpo únicamente, y no encontrando con esto el poder para dar apoyo y respuesta a todo padecer del individuo, sumando a ello el hecho de que se sentía “quemada”, (síndrome de burnout- padecer del trabajador donde se siente agotado, con estrés físico y mental), Karla se diploma en Manejo del Padecer Familiar e Intervenciones Familiares, dentro de esa misma búsqueda de tener más opciones que ofrecer, distintas al medicamento y orientación tradicional. Obtiene así grandiosas herramientas para dar una mejor atención a través de la mejora en la comunicación.  

Con MTD conoce al Ser espiritual como parte de todos, y reconoce que esa necesidad no estaba satisfecha, ni entendida. Al empezar a atenderlo en sí misma, mejora todo en su entorno, y comienza a aplicarlo a su trabajo disfrutándolo aún más por primera vez, aprendiendo de cada consulta y sin volver a sentir ese estrés previo.

Actualmente Karla se encuentra estudiando Tanatología y Un Curso De Milagros, herramientas con las cuales complementa su consulta holística. 

Karla comparte que la ciencia y la espiritualidad no están peleadas, sino que, por el contrario, en sinergia dan equilibrio al Ser, pudiendo así sanar, a través de la comunicación, contactando y buscando equilibrio en la mente, cuerpo y espíritu.